Caigo del cielo, traigo un mensaje para todos, soy alguien adorado, ¿Por qué me tubo que pasar esto?.
Me dejaron en la tierra, me lamento, lloro por el castigo que me han dado, me dijeron que no volvería jamas a zurcar los cielos divinos, que había hecho algo terrible, no pude entender, me las arrancaron, mis preciadas alas. Me dijeron que lo único que podría hacer, es vivir como un humano común y corriente, pero ni eso quiero. Aun asi, decidieron ese destino para mi.
Entonces caí del cielo, los pueblerinos notaron mi presencia, llegaron pronto al lugar, me vieron llorando, notaron las heridas en mi espalda, note que todos me veian, yo seguia igual, me importaba poco y nada los demás.
Se acercaban cada vez más, hasta que una niña llego a tocarme en la espalda, yo no di ninguna reacción, la niña paso la mano por la herida, sentia sus manos tibias sobre las ardientes heridas, y continuaba llorando. Ella, tan solo al terminar, me abrazo, la madre entonces dio pasos al frente y quiso quitarla, pero no pudo, la niña le decia que estaba enternecida por una persona que sufre un castigo tan divino como éste.
Entonces, al escuchar estas palabras, la madre la dejo, los pueblerinos se acercaron, me decían que superara la situación, que fuese con ellos a curar esas heridas, "te habrán hecho algo terrible, pero siempre puedes comenzar de nuevo", termine de oírlo que me levante.
Dije que estaban en lo correcto, entonces la madre de la niña que conmovió a toda la gente, desapareció de la multitud, entonces camine con la niña hacia el pueblo, a poco de caminar, llega la mujer de nuevo, con ropa para mi, acepte su regalo, como también el que me habían dado con esas palabras cálidas.
Esas palabras, hicieron comenzar mi camino...
